Credito: Archivo
16-06-13.-Todo lo que Kimberly-Clark produce lo vende, y colabora con el
Ejecutivo para paliar las escasez mediante la importación con la
finalidad de suplir la demanda puntual que se ha presentado, manifestó
David Cahen, presidente de Kimberly-Clark de Venezuela.
“Las fábricas venezolanas autoabastecen el mercado venezolano, pero mientras se normaliza el suministro es necesario recurrir a la importación para cubrir los baches que se presenten”, aseveró el ejecutivo.
Lo que pasa es que la distribución se secó; es decir, agotó todas sus existencias y se fueron creando déficit importantes en los puntos de suministro, por lo que es necesario cubrir esos baches con importaciones.
“En las próximas semanas el consumidor se va a percatar de una mayor disponibilidad de productos. Nosotros estamos comprometidos con el pueblo en producir a máxima capacidad y eso lo vamos a mantener”, aseguró.
Al alto ejecutivo de Kimberly-Clark le pareció oportuna la decisión del Ejecutivo nacional de realizar un seguimiento de la producción, cada 48 horas, del sector de higiene personal.
“Se han dado avances positivos, como el de los certificados de no producción en línea que ahora no tienen restricciones para su solicitud. Eso me parece importante”, manifestó.
“Había atrasos en las autorizaciones, pero en los últimos meses la emisión de certificados ha mejorado sustancialmente y esperamos que se sistematicen los procesos para acelerar los tiempos de producción”, indicó el ejecutivo al salir de una reunión con el ministro del Poder Popular de Industrias, Ricardo Menéndez.
PROYECTOS DE INVERSIÓN
Cahen adelantó que se preparan para responder al vertiginoso crecimiento del mercado venezolano, por lo que tienen previsto realizar un plan de inversiones en el país.
En cuanto al acercamiento de los empresarios con el Gobierno, Cahen manifestó que ha generado confianza para seguir apostando por el futuro de Venezuela. “El anuncio de la inversión de 235 millones de bolívares en un lapso de 6 a 18 meses es una muestra de la apuesta que estamos haciendo por Venezuela y la confianza que tenemos en el futuro, además de que vamos a generar 100 empleos mas“.
La producción nacional representa 70% de las ventas de Kimberly; el restante 30% corresponde a productos importados. “La idea es incrementar el porcentaje de la producción local, por lo que necesitamos invertir para ampliar nuestras capacidades”.
La directiva de la empresa presentó al Ejecutivo un proyecto de ampliación de la producción de papel higiénico. Se instalará una nueva línea convertidora y se incrementará la capacidad del molino. También tienen previsto desarrollar una nueva línea de pañales que duplicaría la oferta de la empresa en el mercado venezolano, y otra en protección femenina.
La planta ubicada en Maracay suple cerca de 15% de la demanda de papel higiénico del país. En pañales la capacidad instalada atiende alrededor de 30% del mercado y en protección femenina alrededor de 20%.
La empresa inició la producción de toallines faciales el año pasado en el país, al igual que de papel toalla. “En el mes de agosto incrementaremos la capacidad de producción en estas líneas en las que nos ha ido muy bien”, adelantó.
“Las fábricas venezolanas autoabastecen el mercado venezolano, pero mientras se normaliza el suministro es necesario recurrir a la importación para cubrir los baches que se presenten”, aseveró el ejecutivo.
Lo que pasa es que la distribución se secó; es decir, agotó todas sus existencias y se fueron creando déficit importantes en los puntos de suministro, por lo que es necesario cubrir esos baches con importaciones.
“En las próximas semanas el consumidor se va a percatar de una mayor disponibilidad de productos. Nosotros estamos comprometidos con el pueblo en producir a máxima capacidad y eso lo vamos a mantener”, aseguró.
Al alto ejecutivo de Kimberly-Clark le pareció oportuna la decisión del Ejecutivo nacional de realizar un seguimiento de la producción, cada 48 horas, del sector de higiene personal.
“Se han dado avances positivos, como el de los certificados de no producción en línea que ahora no tienen restricciones para su solicitud. Eso me parece importante”, manifestó.
“Había atrasos en las autorizaciones, pero en los últimos meses la emisión de certificados ha mejorado sustancialmente y esperamos que se sistematicen los procesos para acelerar los tiempos de producción”, indicó el ejecutivo al salir de una reunión con el ministro del Poder Popular de Industrias, Ricardo Menéndez.
PROYECTOS DE INVERSIÓN
Cahen adelantó que se preparan para responder al vertiginoso crecimiento del mercado venezolano, por lo que tienen previsto realizar un plan de inversiones en el país.
En cuanto al acercamiento de los empresarios con el Gobierno, Cahen manifestó que ha generado confianza para seguir apostando por el futuro de Venezuela. “El anuncio de la inversión de 235 millones de bolívares en un lapso de 6 a 18 meses es una muestra de la apuesta que estamos haciendo por Venezuela y la confianza que tenemos en el futuro, además de que vamos a generar 100 empleos mas“.
La producción nacional representa 70% de las ventas de Kimberly; el restante 30% corresponde a productos importados. “La idea es incrementar el porcentaje de la producción local, por lo que necesitamos invertir para ampliar nuestras capacidades”.
La directiva de la empresa presentó al Ejecutivo un proyecto de ampliación de la producción de papel higiénico. Se instalará una nueva línea convertidora y se incrementará la capacidad del molino. También tienen previsto desarrollar una nueva línea de pañales que duplicaría la oferta de la empresa en el mercado venezolano, y otra en protección femenina.
La planta ubicada en Maracay suple cerca de 15% de la demanda de papel higiénico del país. En pañales la capacidad instalada atiende alrededor de 30% del mercado y en protección femenina alrededor de 20%.
La empresa inició la producción de toallines faciales el año pasado en el país, al igual que de papel toalla. “En el mes de agosto incrementaremos la capacidad de producción en estas líneas en las que nos ha ido muy bien”, adelantó.
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